17 ago 2013

Mi Venganza


Nunca fui de ligar en discotecas. No suelo llamar la atención. Mi atractivo reside en valores que resaltan poco en una discoteca con poca luz, música alta y cientos de personas bailando ridículamente. Nunca me considere guapo y lo sabes. Atractivo soy, muchas mujeres lo ven, otras no. Ellas se lo pierden.
Pero desde que estoy con Anna la cosa ha cambiado. El hecho de ir con ella, de su mano, besarnos de vez en cuando, jugar, tontear, hace que el resto de mujeres ( y algún que otro hombre) me miren con cara de deseo. Miradas lascivas entre la multitud. Miradas que follan.
Aquella noche pintaba aburrida. Después de cenar por el centro y bebernos un par de jarras de Sangria, el calor y el cansancio acumulado de la semana vaticinaban una noche corta y aburrida. Andando sin destino aparente, me preguntas que quieres que hagamos.  Casualidades de la vida me lo preguntas justo en la puerta de la discoteca donde pasaba mis años de adolescencia. Aquellos donde mi pequeño sobrepeso hacia que no ligara en exceso.

Anna: ¿Que te apetece que hagamos?
Yo: Quiero que entremos aquí. Me digas quien es el chico mas guapo de la discoteca y te vayas a por el.  A partir de ese momento, tu y yo no nos conoceremos.
Anna: “¿Pero estas loco? Sabes que capaz soy y si me lo ligo te morirás de celos. ¿ Que hago si se me lanza?”
Yo: “Yo estaré mirándoos desde lejos. En el momento oportuno, cuando el crea que te tiene en el bote, me pondré a vuestro lado y te seduciré como la primera vez. “

Me agarras fuerte la mano, me abrazas, me besas en el cuello, y me dices al oído que solo de pensarlo te están entrando los calores. Me besas y desapareces. Parece que la víctima la elegirías tu y no yo. Lo acepto.
Tras pedirme una copa y dejarte aproximadamente 10 minutos, te veo a lo lejos.  Estas hablando con un armario de 185, brazos tatuados y cuerpo de mas de 8 años de gimnasio. Esta acompañado por dos  amigos mas y una chica que parece su hermana.
De vez en cuando me miras y sonries. La inteligencia de tu elegido hace que no se entere de nada. Le hablas al oído, te acercas un poco, flirteais. No sabia que eras tan buena actriz. Desconicia esa faceta tuya. Me despisto por un rato y cuando vuelvo a mirar ZAS, estas en sus brazos. Momento de actuar.
Tus gorilas van a la barra a pedir algo y te quedas sola con la chica. Es mi momento. Me acerco y te pregunto.. ¿Sonríes así siempre, o solo es cuando sales por aquí? Te empiezas a reír, la hermana de tu ligue tiene los ojos como platos. Esta hasta preocupada de que estés hablando con otro y su hermano esté a punto de volver.  De hecho, te dice al oído que a su hermano eso le va a sentar fatal y puede que se lie.
La tensión crece por momentos, tanto la sexual como la ambiental. Al  volver con sus copas, tu ligue viene a por mi súper ofendido, “ Que haces hablando con mi chica” “¿Con Dos abrazos y tres frases de parvulario te atreves a llamarla ya tu chica?” Te cojo de la mano y nos perdemos rápido entre la multitud. Parece que tu gorila nos sigue con ganas de bronca.
Lástima, que mientras el buscaba y buscaba, tu y yo estuviésemos en los baños echando el polvo más sucio que hemos echado nunca.


“Te dije que te seduciría como la primera vez, con mi voz y mis manos y asi hice”